Una lápida tallada en mi frente tiene tu nombre
y la huella imborrable de tu aliento aún sigue aquí perforando en mis recuerdos
Quiero que la imagen de tu rostro muera en mi pensamiento
y poder secar con los acordes de mi alma la lluvia de tus ojos
Coro:
Y tus caricias son el deseo de mi destino, el viento es testigo mudo de nuestros labios, que se desgastan con los besos que escondemos en la oscuridad
Hay veces que prefiero soñarte que tenerte dibujando el olor de tu piel en cada sueño
que despierta el deseo con la idea de tu mágico cuerpo, descifrando los misterios que guardas en silencio
Tu mirada nocturna invita a escribir mis fantasías con el tinte de mi sangre.
Coro:
Y tus caricias son el deseo de mi destino, el viento es testigo mudo de nuestros labios, que se desgastan con los besos que escondemos en la oscuridad