Voy andando sola por la Castellana
en busca de algún sueño.
Una nube pasa,
los árboles me cierran
el paso en el bulevar.
¡Maldita madrugada!
No te aguanto más.
Voy dejando huellas
de mi soledad.
La luna parda me mira,
sólo me cuenta mentiras.
Dormitan las golondrinas
debajo de mi camisa.
Hay algún perro que ladra
y una campana me llama.
Camino y siento en la espalda
clavarse miradas de gentes extrañas.
Todas las lunas son frías,
todo el amor es ceniza.
Tengo los huesos en ruinas.
Ya no me queda saliva.
¿Dónde estará el horizonte?
¿Dónde estará la salida?
Camino y siento en la espalda
clavarse miradas de gentes extrañas.