Hoy que estoy tan triste
vacío de ideas
se ha posado en mis hombros
el recuerdo de ella.
Era como el vino que endulza la pena,
era como un sueño querer retenerla,
era un claro día callada y sincera.
Pero una mañana cogió su maleta
y dejó en mi frente un beso
y de nuevo mi vieja tristeza.
A veces me duele y busco sus huellas
o siento nostalgia de cosas pequeñas.
A veces la llamo y no me contesta...