Llueve a veces sobre los verdes sauces y el río,
canta la lluvia su campanilla por los altos bohíos,
y entre la niebla un niño
cruza un cielo perdido,
su canoíta boga las leves olas
y es tan pequeño como los sueños de mi niñez.
Ya lo ves, amanece,
besa el sol los cipreses
y un arco iris cuelga colores,
tiran sus líneas los pescadores
y yo soñando lo que se fue.
Quiero morir aquí, donde el ancho azul del cielo se esfuma,
junto a las islas, entre los barcos, al borde de la bruma,
para escuchar el ronco
bramido de los troncos
bajando por el río
y los alaridos de los balseros
cortando el viento de mi niñez.
Ya lo ves, amanece,
besa al sol los cipreses
y un arco iris cuelga colores,
tiran sus líneas los pescadores
y yo soñando lo que se fue.
Ya lo ves, amanece…