Recuerdo aquella vez,
que yo te conocí;
recuerdo aquella tarde,
pero no me acuerdo
ni cómo te vi.
Pero si te diré
que yo me enamoré
de esos tus lindos ojos,
y tus labios rojos
que no olvidaré.
Oye esta canción que lleva
alma, corazón y vida;
estas tres cositas
nada más te doy.
Porque no tengo fortuna,
estas tres cosas te ofrezco:
alma, corazón y vida
y nada más.
Alma para conquistarte,
corazón para quererte,
y vida para vivirla
junto a ti.
Alma para conquistarte,
corazón para quererte,
y vida para vivirla
junto a ti.