Yo se que soy muy poco
en esta vida y que en la tuya
tambien soy poca cosa.
Un suspiro en tu angustia
construida y en tu jardin
un petalo de rosa.
Yo busco sin embargo darte
un mundo hecho con el esfuerzo
de mis manos, con estrella y nubes
y mar profundo, fundido lo divino
con lo malo.
Y tu como veleta dislocada
gira sobre mi torre a cuelquier
viento que te trae una caricia
mal pagada.
Tu tienes a mi amor tan mal
herido que se puede morir en
un momento.
Y entonces, y entonces ya veras
lo que has perdido.
Y entonces ya veras lo que has
perdido.