Es verdad,
que hace tiempo que te tengo en el olvido,
que ni rezo, ni me acuerdo,
de llevarte rosas rojas a tu altar.
Es verdad,
que tu nombre yo no lo digo desde niño,
pero ahora,
yo, yo necesito
que me ayudes
y te olvides lo que he sido.
Ave María,
escúchame,
Ave María, Ave María,
tú sabes,
tú sabes que yo la quiero
y es todo lo que tengo.
Ave María,
Ave María escúchame,
Ave María, Ave María,
te pido,
yo te pido que no termine,
nuestro amor, nuestro amor. (Ave María).
Recordarás,
aquellas flores que adornaban tu capilla,
eran mías, solo mías,
yo las robaba por las noches para ti.
Recordarás,
cuantas veces te he rezado de rodillas,
mis amigos, se reían,
al mirarme, se reían, se reían.
Ave María,
Ave María escúchame,
Ave María, Ave María,
tú sabes,
tú sabes que yo la quiero
y es todo lo que tengo.
Ave María,
Ave María escúchame,
Ave María, Ave María,
te pido,
yo te pido que no termine,
nuestro amor, nuestro amor, (Ave María),
nuestro amor, (Ave María), nuestro amor. (Ave María).