Fuimos esclavas de una sociedad machista,
fuimos presas de sus reglas sin poder cuestionar
A decir que sí nos enseñaron, a ocultar lo que sentimos,
siempre atentas a la casa y nada más
Fuimos criadas con la estúpida idea
que la mujer solamente en la cocina debe estar
Y así fuimos educando a nuestras hijas
para que se acostumbren a esta tonta realidad
Y hasta que llegó la liberación
Y por fin llegó, la liberación?
Nos preparamos para poder trabajar,
salimos siempre a estudiar par poder mejorar
Competimos por un sueldo, aguantamos los acosos
y las tontas cargadas de los demás
Y cada vez tenemos más obligaciones
además del hogar que no podemos dejar
Seguimos siendo presas de la limpieza,
también de la belleza, el trabajo y estudiar
Y es que hoy, la mujer de hoy,
carga con la de ayer y también la de mañana!