Eran las siete de la tarde
y como siempre yo corría
para llegar ante su puerta
y pasar las horas muertas
en los brazos de María,
María.
Pero una tarde de Febrero
en una carta me decía
me he marchado, no me esperes
y perdóname si puedes
ya te explicaré algún día.
María mi amor, mi amor, mi amor
por qué te fuiste
dejando mi amor, mi amor, mi amor
cansado y triste.
María mi amor, mi amor, mi amor
por qué te fuiste
María , amada mía
María mi amor.
Eran las siete de la tarde
y cada tarde yo volvía
durante meses a su puerta
esperando verla abierta
esperando que estaría, María.
Y una mañana de Febrero
una mañana trsite y fría
yo saí por el sendereo
a cruzar el mundo entero
tras los pasos de María.
María mi amor...