En la Plaza de las Monjas una paloma me ha dicho
que esta noche me esperabas y me has puesto nerviosito,
porque sé que has descubierto que mis versos van contigo, ¡gitana, Rocío!
Huelva, descubridora llena de magia,
cada rincón que tienes sabe a mi casa.
Y remo “pa” tu barquita, niña déjame que sea,
“pa” sentir como el agüita te mece con la marea.
¡Ay, Huelva, déjame, déjame que sea!
“pa” sentir como el agüita te mece con la marea.
Barrios llenitos de arte, donde cura tus penitas
al calor de una guitarra marinera y campesina.
Abanico de sorpresas, capitanas tus mujeres.
Cada vez que estoy contigo mi corazón se detiene.
Huelva, descubridora llena de magia,
cada rincón que tienes sabe a mi casa.
Y remo “pa” tu barquita, niña déjame que sea,
“pa” sentir como el agüita te mece con la marea.
¡Ay, Huelva, déjame, ay, déjame que sea!
“pa” sentir como el agüita te mece con la marea.
Y remo “pa” tu barquita, niña déjame que sea,
“pa” sentir como el agüita te mece con la marea.
¡Ay, Huelva, déjame, ay, déjame que sea!
“pa” sentir como el agüita te mece con la marea.
¡Ay, te mece con la marea, ay, que esta noche sea!
¡Ay, que esta noche sea!
Y remo “pa” tu barquita, niña déjame que sea,
“pa” sentir como el agüita te mece con la marea.
¡Ay, Huelva, déjame, ay, Huelva, déjame, que esta noche sea!
“pa” sentir como el agüita te mece con la marea.