Aquí estamos los dos,
La misma habitación,
Tratando parecer indiferentes,
Tu copa rota en un rincón,
Y la cama muerta de sed,

Porque me miras fijamente
Pero no me ves, voy resbalando en la pared,
Me hago pequeña sin saber,
Porque te empeñas en dejar
Mi alma muda... Sorda y

¡Rota!
Igual que todo lo que tocas,
Soy el blanco fácil de los tiros,
Que lanza tu boca.

Veo salir el sol,
Tras la ventana del hotel,
Mientras en nuestra habitación, no para de llover,
Llévame a casa ya,
Te dije sin pensar,
Y tu parasteis el cohe en medio de ningún lugar

Corro y mis pasos pesan más,
A cada grito que me das,
Porque te empeñas en dejar
Mi alma muda... Sorda y

¡Rota!
Igual que todo lo que tocas,
Soy el blanco fácil de los tiros,
Que lanza tu boca.

¡Loca!
Igual que cuando tu me tocas,
Antídoto y veneno, torpe juego,
¿Y porque aún te quiero?

Rota
Igual que todo lo que tocas,
Soy el blanco fácil de los tiros, que lanza tu boca

¡Loca!
Igual que cuando tu me tocas,
Antídoto y veneno, torpe juego,
¿Y porque aún te quiero?

¡No!
Ya no mirare hacia atrás,
¡Ahora me toca olvidar!,
No pienses que llorare
Toda la vida porque
¡No!
No seré más para ti,
Marioneta, triste ¡y gris,!
Porque no vas a dejar,
Mi alma muda, sorda y rota