Callejuela sin fin,
casas de barro y paja,
caballos que relinchan
y horneros que cantan.
Perro que ladra a un hombre
que recién llega en chata,
que carga su equipaje
y que se va pa’ las casas.
La escuelita cerró,
ya están de vacaciones
no ha quedado ningún niño,
pero sí sus corazones.
Hombres están hachando
un árbol monte adentro,
ya se les hizo la hora
porque les llega el invierno.
Viento del norte
sopla en las calles
bailan felices en Tafi del Valle
Así es que brilla el sol
y el pueblo está contento
desprende el viento el perfume
que dejan las flores del cerro
Así es que brilla el sol,
y el pueblo está contento,
ahí se levanta un viento
que da el suspiro a este cerro.
Viento del norte,
sopla en las calles,
almas felices en Tafi del Valle