Que soy maldito y objetador, dice la fiscalía.
Me acusan de manipular datos de economía.
De ser el típico provocador irresponsable
En un país inestable.
Me acusan de hacer blanco con mis flechas en cierta asamblea
Y de cazar cangrejos sólo cuando baja la marea.
Que soy un simple trovador que dice lo que piensa,
Que soy poeta e intocable, dirá la defensa.
Que quién ha visto a un cantautor objetivo y valiente
Hablar bien de un presidente.
Y el juez cab calloway dirá que yo soy un proselitista
Que ando buscando la oportunidad para cantar así:
Heri, heri, heriei.
Heri, heri, heriyó.
Si tú no cantas conmigo eres un sanguengue
Eres un guari guari
Te pongo wemba y yo halele kuisa masoriale.
Y si tus cantas conmigo te pongo bien,
Yo te pongo chamba, te pongo aché.
Que soy un manipulador, dice la fiscalía.
Me acusan que de los errores hago apologías.
Que soy un franco-tirador que tira a la cabeza
Y se esconde en la maleza.
Me acusan de hacer demagogia con muy pocos elementos
Y de buscar una salva de aplausos con mis argumentos.
Que hago muy bien en criticar la economía y la prensa
Y que un artista es un tribuno, dirá la defensa.
Y que en los juicios por presuntos cargos de conciencia
La historia dicta sentencia.