Una noche muy cruda de invierno
A Langosta lo vieron pasar
Con un traje marrón entallado
Y una vaga tristeza al mirar
Con el pucho apagado en la boca
Recostóse el malevo a pensar
En quien sabe que cosa tan loca
Que a veces los bichos lo vieron llorar
Las viejas decían: Son penas de amor
Que tarde o temprano se habrán de saber
Y cuentan que un día lo vieron volver
Diciendo, borracho, con hondo dolor
Tal vez algún día terminen de hablar
Y para ese ejemplo me tengo yo fe
Yo tengo el remedio que no ha de fallar
Dio un beso al cuchillo, y cantando, se fue
Que soy malo, murmura la gente
Que a llamarme Langosta llego
Que jamás me encontraron sonriente
Y que miro con rabia y rencor
Yo no puedo mirar de otro modo
Ni es posible con ser lo que soy
Desgraciarme no quiero del todo
Por eso me callo, suspiro y me voy
Una noche, después de algún tiempo
A Langosta lo vieron venir
Con un brillo fugaz en los ojos
Y una mueca feroz al reís
Al llegar a la esquina, en que siempre
Recostóse el malevo a pensar
Arrojando el cuchillo a la calle
Sacando un retrato se puso a llorar