En la penumbra
de esta noche divina y prieta
Sobre la tundra
que puebla mi alma siempre despierta
Se oye un lamento como preludio de las horas muertas
Horas que pasan con la agonía de una muerte lenta
vuelve el silencio a vestirme de oro mi santo
vuelve el recuerdo de mis abuelas a hacerme fuerte en la espera
vuelven los discos que me enseñaron a adorar la música
volvió mi padre después de veinte años
Ay si tu volvieras...
Si tu volvieras te vestiría de oro mi santo
callaría las cosas para que tu puedas oír mi canto desesperado
Sí tu volvieras te vestiría de oro mi santo
Callaría las cosas para que pudieras oír mi canto desesperado...
Si tu volvieras te vestiría de oro mi santo
callaría las cosas para que pudieras oír mi canto desesperado
Si tu volvieras te vestiría de oro mi santo
que se pare el mundo para que tu puedas oír mi canto desesperado...