Cuando me cansé de tanto discutir pensé
no vendría mal un tiempo para respirar
y luego recomenzar
pero qué ironía no creería que ese sería el final.
Sin ti la vida sabe a nada
sin ti las horas ya no avanzan y me atrapan.
Sin ti la vida sabe a nada
y soy adicto a ese sabor, ese que me dabas tú.
Ácida al hablar, cálida al acariciar
dulce al besar y un amargo despertar
cuando sé que ya no estás
y ahora qué ironía
no distingo azucar de la sal.
Sin ti la vida sabe a nada
sin ti las horas ya no avanzan y me atrapan.
Sin ti la vida sabe a nada
y soy adicto a ese sabor, ese que me dabas...
sé que ya no me alcanza
con decir lo siento
no alcanzo a dejar mensajes en tu teléfono
y si aún te hago falta
no alcanzo a saberlo.
Sin ti la vida sabe a nada
sin ti las horas ya no avanzan y me atrapan.
Sin ti la vida sabe a nada
y soy adicto a ese sabor, ese que me dabas tú.